top of page

Conversamos con Minor Rodríguez de Gestionando Hábitat, S.A, World Vision

  • Foto del escritor: CERES
    CERES
  • 16 jun
  • 3 Min. de lectura
ree

1.      En América Latina, millones de hogares enfrentan algún tipo de déficit habitacional. ¿En qué consiste este déficit?

El déficit habitacional puede ser de tipo cuantitativo o cualitativo. El déficit cuantitativo se refiere a la falta de viviendas, mientras que el déficit cualitativo se determina, en la mayoría de los países, con base en la evaluación de tres elementos constructivos: el piso, el techo y las paredes. En Latinoamérica, millones de viviendas tienen pisos predominantemente de tierra, lo que ocasiona graves problemas de salud para sus habitantes, especialmente en niños y adultos mayores.


2.      ¿En qué consiste la iniciativa “100.000 pisos para jugar”?

Esta iniciativa nace a partir de un estudio desarrollado junto a la Federación Interamericana del Cemento, en el que descubrimos que, en América Latina, 10 millones de hogares tienen pisos de tierra. Nuestra meta es cambiar la realidad de al menos el 1% de esta población. La idea es reemplazar 100.000 pisos de tierra por concreto en viviendas vulnerables de toda América Latina y el Caribe, hasta el año 2028. Se llama 100.000 pisos para jugar porque los principales beneficiarios son los niños y niñas, quienes son la población más vulnerable, ya que están en contacto directo con la tierra: juegan, caminan y gatean sobre esta superficie.


3.      ¿Cómo llega esta iniciativa al Ecuador?

La iniciativa llega al Ecuador gracias a una alianza internacional entre Hábitat para la Humanidad y World Vision, firmada en el año 2021. Como organizaciones compartimos varios objetivos en común y una visión de desarrollo muy similar.     En Ecuador, el objetivo es comenzar reemplazando durante 2025 al menos 200 pisos de tierra por pisos de cemento en las provincias de Chimborazo, Imbabura, Cañar, Azuay y otras. Chimborazo será priorizada por tener el mayor índice de desnutrición crónica infantil en el país. El avance también dependerá de los lugares donde encontremos socios estratégicos. Hacemos un llamado, principalmente, a las empresas del sector de la construcción, pero también a todos los actores de la sociedad: instituciones financieras, ONGs, y organizaciones vinculadas con la salud. Nosotros no podemos hacerlo solos: necesitamos recursos y el apoyo de la sociedad ecuatoriana.


4.      Habiendo tantas necesidades relacionadas con la calidad de la vivienda, ¿por qué centrar los esfuerzos en el piso?

Buscamos mejorar las condiciones de habitabilidad. Sustituir los pisos de tierra por pisos de concreto reduce significativamente los factores de riesgo asociados a enfermedades provocadas por parásitos, virus, bacterias e insectos.  Un estudio del Banco Mundial y la Universidad de California confirma que reemplazar un piso de tierra en una vivienda genera beneficios directos en la salud de las familias: los niños experimentaron una reducción del 70% en infecciones parasitarias, 49% en diarreas y 81% en anemias; además, se observó un incremento del desarrollo cognitivo de entre el 36% y el 96%.  


En muchos casos, el cambio del piso se convierte en un motor para la familia: un primer paso hacia la mejora progresiva de la vivienda.


5.      ¿Cuál es el impacto de esta iniciativa en la población beneficiaria?

Hace unos meses realizamos una valoración de impacto en Guatemala y Honduras. Los resultados fueron sorprendentes: las familias mejoraron su economía en un 20%, redujeron en un 80% los gastos médicos e invirtieron un 12% más en mejoras del hogar. Incluso se evidenció una disminución del 15% en la deserción escolar.        


Por otra parte, el 59% de los adultos manifestó satisfacción por el mejoramiento de su vivienda. También se registró una reducción del 52% en los niveles de depresión y del 45% en los niveles de estrés. Es increíble cómo algo tan simple como un piso de aproximadamente 30 metros cuadrados puede tener un impacto tan significativo en la vida de las personas.

 
 
 

Comentarios


bottom of page